Adeline «Addie» LaRue es una jovencita nacida en el siglo XVIII con muchos sueños y deseos de aprender y ver mundo. Ya con 23 años, sus padres arreglan el matrimonio de la chica con un padre viudo. Addie, desesperada porque no quiere el tipo de vida que la ataría para siempre al pueblo de Villon-sur-Sarthe, Francia, se escapa el día de su boda. Pero comete un pequeño error. Creyente de que existen más dioses de los que dicta la iglesia tradicional, ella comienza a rogarle a esos entes que la liberen de un destino que mataría su espíritu. De lo que no se da cuenta es que, conforme se deshace en rezos, cae la noche y hace lo que su «mentora» en esos temas (Estelle, la «solterona» del pueblo a la que creían «bruja») le advirtió que nunca hiciera: rezar a los dioses durante la noche.

Hecha la invocación, la oscuridad aparece y hace un trato con Addie. Ahora, tiene que pagar el precio por lo que pidió; Addie desde entonces es inmortal, pero va a pasar por las generaciones venideras sin que sea recordada por nadie. Incluida la familia que dejó atrás.

Pasan 300 años, y llega hasta el 2014. Ha sobrevivido no solo a todos los sucesos históricos posibles, sino a lo que implica para ella que nadie en esos tres siglos la recuerde. Solo Luc, la oscuridad con la que ha hecho el trato, es el único que siempre está con Addie…

Hasta que entra a una librería y conoce a Henry, el encargado del lugar, que le dice a Addie que la recuerda.

Si insistes en llamarlos, presta atención: ten cuidado con lo que deseas y accede a pagar el precio. Y por muy desesperada o grave que sea la situación, nunca reces a los dioses que responden tras caer la noche.

La Vida Invisible de Addie LaRue

¿Alguna vez has escuchado ese dicho que dice, ten cuidado con lo que deseas? Es lo que ocurre en esta historia, como se lo advierte Estelle a Addie. Addie es una chica adelantada a su tiempo que quería más de lo que la vida le estaba dando en ese momento. Ella es un espíritu libre, que se resiste a lo que dicta la sociedad y desafía los parámetros establecidos. Es increíble cómo su fortaleza de carácter —¿o tal vez deberíamos llamarlo testarudez?— la hace seguir adelante pese a la carga emocional que conlleva vivir 323 años sin poder dejar su impronta en el mundo. Sí, podrá inspirar a artistas que la convertirán en su musa en las diferentes formas de arte existentes y participar en los múltiples acontecimientos de la humanidad. Sin embargo, no ha dejado una huella imborrable en nadie. Su capacidad para no rendirse y el modo en que ella siempre logra encontrar algo en qué aferrarse para continuar pese a sus circunstancias y con la oscuridad, entiéndase Luc, constantemente manupulando su mente con el fin de que claudique, la hace, curiosamente, un personaje inolvidable.

En un momento de la vida en la que ella se encuentra exhausta de una larga vida en la que ha pasado por todas las angustias posibles, llega a su vida Henry, un hombre con su propio drama emocional pero en el que ella ve a un igual en ciertos aspectos. Su encuentro con el joven llevará a Addie a un punto de inflexión en el que la conduce a ver su propia vida desde otra perspectiva. Es en este punto en el que finalmente deja una verdadera huella, incapaz de ser borrada.

Volviendo a Henry, me pareció un joven con una melancolía latente que no sabe qué es lo que quiere verdaderamente en la vida. De acuerdo, él quiere ser querido, encajar en su entorno familiar y ser suficiente para las personas que son parte de su vida, ya sea por sangre o por elección. No obstante, siente que hay algo que le falta a nivel existencial, y que no tiene el tiempo suficiente para llenar ese vacío que lleva dentro. Conocer a Addie —y su historia, ya puestos— le dará una nueva visión de la vida, lo cual le da el empuje que necesita para disfrutar de cada segundo que tenga la bendición de tener en el mundo. Henry tiene un rol específico en esta historia y lo cumplió a la perfección.

(¿Saben a quién me recuerda Henry? A Veronika, de Veronika decide morir, de Paulo Coelho. No sé, como que tienen la misma vibra y dilema existencial…)

El tercero de este «triángulo», aunque no lo identificaría como uno amoroso, es Luc, la oscuridad cuyo trabajo es hacer tratos malditos con los humanos. Luc es un ser fascinante, lleno de contrastes; es un caleidoscopio de sentimientos que chocan entre sí. Lo mismo puede ser un amante habilidoso que un demonio en toda regla. (No olvidemos que el nombre que le otorga Addie, Luc, puede venir de Lucifer). Sorpresivamente para ser un ser paranormal, Luc evoca todos los sentimientos primitivos del ser humano: odio, envidia, celos, obsesión, posesión y , amor. Porque la mayor debilidad de Luc es Addie, pues para él ella es un rompecabezas imposible de descifrar, al cual desea doblegar a sus deseos.

¿Mi opinión personal? No creo que tanto Luc como Addie sean capaces de amar, no en este punto en el que se encuentran. Luc está tan obsesionado con Addie, que solo quiere poseerla. Addie ha amado a varias personas, tanto hombres como mujeres (tanto Addie como Henry son personajes pansexuales), durante su travesía inmortal, pero a todos los ha tenido que dejar atrás. ¿Sintió algo real por Henry? Sí. Si no fuera así, no hubiese tomado las decisiones que tomó por él. ¿Lo amó? No lo creo. Más bien, siento que fue la idea de que Henry es el único humano que no la olvidará lo que la atrajo emocionalmente a él. ¿Amó a Luc en algún momento? Puede. ¿Será que lo ama pero se rehúsa a admitirlo, tal vez? Al fin y al cabo, si hay algo que Addie desea más que amor, es la libertad. En cuanto a Henry, creo que él sí pudo haberse enamorado de Addie en su momento, pero al final ella terminó siendo para él una luz que le alumbra el camino a seguir.

Este libro lleva conmigo unos dos años, y no es hasta ahora que logro leerlo. La primera vez que lo intenté, no pude pasar de la primera parte de esta larga historia (tiene siete partes en total y la versión física de libro se compone de 504 páginas), y tuve que dejarlo a un lado. Y es que este libro tiene un comienzo muy lento, tanto en ritmo como en narrativa. Conforme pasan las páginas, te das cuenta de que tenía que ser así para poder conocer a Addie; el contexto de su vida se entiende mejor con esa primera parte.

Una vez terminada la mencionada parte, narrada por Addie, por cierto, es que la trama te engancha y no te suelta hasta que lo terminas. La historia te lleva en un viaje por el tiempo en el que experimentas un sinfín de emociones. La angustia que experimentas, por ejemplo, al no tener la certeza de dónde va a dormir Addie cada noche (la extensión de lo que significa que nadie te recuerde va más allá de una mera cuestión de memoria), o de cada persona que la marcó en su momento (me dolió cuando Remy le rompe el corazón), así como sus interacciones con Luc, Henry y otros personajes secundarios (los cuales, si bien cumplieron su misión a cabalidad, no destacan lo suficiente como para mencionarlos), te hace sentir demasiado. Este libro te hace sufrir y disfrutar a partes iguales, dejando una satisfacción inusual cuando lo terminas de leer.

En cuanto a elementos técnicos, el libro se vuelve más ameno y su ritmo va in crescendo una vez llegas a la segunda parte de la historia y los sucesos cobran vida de un modo más intenso. El tener la perspectiva de Henry en momentos clave ayuda al proceso de lectura. Aunque me hubiera gustado que las perspectivas de Addie y Henry fueran más balanceadas y equitativas, entiendo que todo gire en torno a Addie. Porque no nos equivoquemos, la única protagonista aquí es Addie LaRue. Nadie más.

Este es mi primer libro de la señora Schwab, y me he quedado encantada con su escritura inteligente y astuta, sus giros inesperados y su creatividad literaria. Es uno de los mejores libros que he leído este año y del cual me llevo gratos recuerdos. ¡Esta historia sería fenomenal si se llevara a la pantalla, en forma de miniserie!

Definitivamente, nunca voy a olvidar a Addie LaRue.

Acerca del Libro

Fecha de Publicación: Octubre 6, 2020
ISBN-10: 8416517371; ISBN-13: 978-8416517374
Publicado Por: Umbriel
Serie: Ninguna
Género: Romance de Ficción para Mujeres
Tapa Blanda, 504 páginas

• Por la autora best seller, V.E. Schwab.
• Una de las novelas más esperadas de 2020.
• Un libro autoconclusivo perfecto para los lectores de “La mujer del viajero en el tiempo”.

Una vida que nadie recuerda.
Una historia que nunca olvidarás.

Francia, 1714.
En un momento de desesperación, una joven hace un pacto faustiano para conseguir una vida infinita. ¿Cuál es el precio que deberá pagar para vivir eternamente?
El olvido.
Todas y cada una de las personas que conoce la terminarán olvidando.
Así es cómo comienza la extraordinaria vida de Addie LaRue; una vida que atraviesa siglos y continentes, una vida que atraviesa la historia y el arte, en la que ella intenta comprender hasta dónde será capaz de llegar con tal de dejar su marca en el mundo.
Sin embargo, todo cambia cuando, después de 300 años, Addie conoce a un hombre en una librería. Pero hay algo más… él es la única persona que recuerda su nombre.

Acerca de la Autora

VICTORIA “V.E.» SCHWAB es autora número uno en ventas del New York Times con más de veinte libros, incluida la aclamada serie Shades of Magic, la serie Villains, la serie Cassidy Blake y el bestseller internacional La Vida Invisible de Addie LaRue. Su trabajo ha recibido elogios de la crítica, se ha traducido a más de dos docenas de idiomas y ha sido seleccionado para televisión y cine. First Kill, una serie de vampiros juveniles basada en el cuento del mismo nombre de Schwab, se encuentra actualmente en proceso en Netflix con Belletrist Productions de Emma Roberts como productora. Cuando no está deambulando por las calles de París o subiendo penosamente las laderas inglesas, vive en Edimburgo, Escocia, y suele estar escondida en la esquina de una cafetería, imaginando monstruos.